2️⃣ Organización y desarrollo 📐
En un espacio reducido (aprox. 25×20 m, adaptable), se juega un 4×4 + 1 comodín que actúa como apoyo libre para el equipo en posesión.
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El objetivo inicial es mantener la posesión y completar un número determinado de pases (por ejemplo, 5 o 6) dentro del carril central.
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Una vez lograda esa secuencia, se debe liberar a un jugador del carril central mediante pase o movimiento coordinado, permitiendo así girar el juego hacia banda.
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En ese momento, el balón se juega hacia los jugadores exteriores, que realizan una situación de 2×1 contra un defensor del equipo rival.
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Si el ataque en superioridad (2×1) se ejecuta correctamente, se puede añadir la llegada de jugadores al área (según lo que se demande tácticamente) para finalizar y defender la acción.
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Tras la finalización, se reinicia desde el centro, manteniendo la rotación de roles entre interiores, comodín y jugadores de banda.
El comodín interior ayuda a crear superioridades numéricas imperceptibles en el juego corto, favoreciendo la continuidad y el giro del balón hacia la zona menos presionada.